Si tiene artritis, ya conoce esta enfermedad que causa inflamación y dolor en algunas partes de su cuerpo. La mayoría piensa que la artritis afecta principalmente las articulaciones — como las manos, las muñecas y los pies. Pero ¿Sabía usted que a veces puede afectar otras partes del cuerpo, incluyendo los ojos?
¿Cómo afecta los ojos la artritis?
Un tipo de artritis conocida como artritis reumatoide (AR) daña el tejido conectivo que recubre los extremos de las articulaciones óseas. Este tejido conectivo se compone principalmente de una sustancia conocida como colágeno. El colágeno es también el principal componente de la esclera y de la córnea.
La artritis reumatoide se considera una enfermedad que afecta todo el organismo (una enfermedad sistémica) porque puede afectar también los sistemas cardiaco y pulmonar.
El ojo seco y la artritis
Muchos que tienen artritis sufren también de ojo seco. El ojo seco puede estar relacionado con el síndrome de Sjogren, un trastorno del sistema inmune que suele relacionarse con la AR. Las mujeres son más propensas que los hombres al ojo seco con artritis.
De no tratarse, el ojo seco no sólo es incómodo sino que puede causar infecciones y cicatrices en la córnea. Quienes tengan ojo seco y artritis es posible que tengan que utilizar un ungüento, lágrimas artificiales o gotas oftálmicas medicadas para mantener sus ojos húmedos. Es posible que tenga que utilizar también pequeños tapones (conocidos como tapones lagrimales) insertados en sus conductos lagrimales para mantener las lágrimas en la superficie del ojo.
Otros problemas oculares relacionados con la artritis
El síntoma distintivo de la artritis — la inflamación — puede llevar a problemas visuales cuando se afectan sus ojos.
Hay quienes con la artritis pueden desarrollar escleritis, especialmente los adultos entre los 40 y los 70 años de edad. Es en esta época cuando la inflamación adelgaza la esclera o la pared ocular. Los síntomas de escleritis pueden aparecer como ojos permanentemente rojos (a pesar de utilizar gotas oftálmicas), dolor profundo en los ojos y sensibilidad a la luz. La escleritis puede ser peligrosa porque cualquier lesión en el ojo puede hacer que se adelgace el globo ocular y se abra.
La uveítis es otra afección ocular relacionada con la artritis. Se produce cuando la úvea — la capa de tejido que se encuentra entre la retina y la esclera, incluyendo el iris— se inflama. Los síntomas de uveítis son dolor ocular, sensibilidad a la luz y visión borrosa.
Los medicamentos con esteroides pueden ayudar a controlar la inflamación de la escleritis y la uveítis. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el uso de esteroides, así como la inflamación que éstos tratan, pueden llevar a otros problemas oculares.
Algunas personas con artritis pueden desarrollar glaucoma. Esto ocurre cuando la inflamación afecta la parte del ojo que ayuda a drenar el líquido. También puede desarrollarse glaucoma como efecto secundario del uso de corticosteroides para tratamiento de la artritis. Si no se puede drenar debidamente el líquido, puede aumentar la presión intraocular y dañar el nervio óptico, causando pérdida de visión. El glaucoma no produce síntomas en sus etapas iniciales. Eventualmente, es posible que pueda ver halos coloreados alrededor de las luces. Los objetos se verán borrosos o notará puntos ciegos en su campo visual. Las gotas oftálmicas pueden ayudar a reducir la presión intraocular. A veces puede ser necesaria la cirugía para mejorar el flujo de salida del líquido del ojo.
El uso de medicamentos con esteroides para tratar la artritis puede también aumentar el riesgo de desarrollar cataratas. Esto sucede cuando el cristalino, la parte del ojo que es naturalmente transparente, se opacifica. Las cataratas hacen que las cosas se vean borrosas y los colores se ven desteñidos. También dificulta la visión nocturna. Con la cirugía de cataratas, su oftalmólogo puede retirar el cristalino opacificado y reemplazarlo con un lente artificial para mejorar su visión.
Debido a que el uso de esteroides a largo plazo puede afectar sus ojos, debe consultar a un oftalmólogo para ayudarle a preservar su visión. También debe consultar con sus médicos sobre la forma en que podría limitar el uso de esteroides.
Controlar la inflamación ayuda a su organismo y a su visión
Si tiene artritis y observa cambios en su visión u otros problemas oculares, podría ser indicio de que tiene inflamación en los ojos. El tratamiento de la inflamación ocular siempre se relaciona con el efecto del tratamiento de la inflamación producida por la artritis. Es importante trabajar conjuntamente con sus médicos para ayudar al control adecuado de su artritis.
Ya sea que tenga o no artritis, encontrar y tratar los problemas oculares de forma temprana puede ayudar a prevenir la pérdida de visión. Consulte a su oftalmólogo periódicamente o a los intervalos que éste recomiende para proteger su visión.
¡No permita que la artritis le robe su visión!
Quienes tienen artritis están en riesgo de desarrollar problemas oculares. Si usted trata su artritis con esteroides, o si presenta los siguientes síntomas, asegúrese de consultar a su oftalmólogo para que le practique un examen médico oftalmológico:
- Ojos secos (sensación de ardor, prurito o sensación arenosa en los ojos)
- Ojos constantemente rojos (con visión borrosa, dolor o sensibilidad a la luz)
- Dolor ocular severo (con sensibilidad a la luz, lagrimación o enrojecimiento)